jueves, 10 de febrero de 2005

Una noche en Cerdanyola

Cerdanyola del Vallés, 10 de febrero de 2005

Bueno, amigos cofrades, lo de ayer fue una experiencia.

Voy a intentar hacer una humilde minicrónica de la velada, pero ya sabéis que estas cosas las hace inmejorablemente el señor Taxonera, que es el Maestro.

El Pacorro, nos invitó ayer a la Churri y a mi, a cenar a su casa, porque según él, nos debía esa cena por unas gestiones con Canal+, aunque yo creo que la excusa era montar un cenorro del 15.

De entrada, y para enseñarnos las maravillas de la Thermomix, nos hizo asi, de repente, improvisando, un zumo de naranja, que creo que es el emjor zumo que he probado en mi vida, con 3 naranjas, un limón, agua y azúcar. Textura cremosa, pero sin empalagar, suave, buenísimo.

Una vez en la mesa, nos sacó para picotear una delicatessen deliciosa a base de patatas fritas de bolsa, con queso fundido por encima y miel, ¡cómo no! Paco y su miel... Aquí empezaron los primeros grititos de placer de menda lerenda, imitando los alaridos de las mejores comidas de la cofradía. La Churri quedó encantada con este aperitivo.

Dimos paso al rpimer plato, que se componía de una formidable crema de calabacín. Brutal. Sencillamente genial. Textura inigualable, sabor intenso, temperatura algo elevada, pero a mi me encanta comer las cosas muy calientes, así que, perfecto. La Churri seguía encantada de los resultados de la Themomix.Para romper sabores y preparar el paladar para la siguiente ronda, nos sorprendió con un sorbete de limón, que no tenía nada que envidiar a los mejores restaurantes. Yo seguía con mis gritos a lo Chewacca y mi compañera seguía flipando.

Para el segundo plato, el muy cabrón me dijo que no sabía si me gustaría, que yo era muy raro para comer (yo creo que no soy tan raro, porque lo pruebo todo y lo que no me gusta lo digo) y me dejó un poco acojonado, y mosqueado porque pensé que la cena se iba al garete por culpa del segundo plato, y conociendo al Paco, pues uno se espera cualquier cosa rara, con miel, eso sí.
Entonces vino el tsunami gastronómico, la tormenta de la cocina, el deseo desenfrenado, la pasión culinaria,
el muy cabrón me saca unos platos con RAPE A LA MARINERA CON ALMEJAS. Joderrrrrrr!!!!!!!!, ahí los gritos chewakeros se destaparon por completo, me olvidé de la mesa y de los comensales y centré todos mis puntos neurálgicos en esa maravilla, esa salsa espesita con ese sabor, con ese toque de pimienta, con esas almejas tan ricas, con ese rape tan tierno, con ese pan tostado navegando entre olas de sofrito, aggghhh!!!! no quería que eso se acabara nunca!!!

Pues nada, comentar que esto fue regado con un Rioja Lagunilla Reserva, que digamos se dejaba beber muy bien.

En fin, una velada muy agradable, con una muy buena compañía, un ambiente exquisito, porque si algo tienen Paco y Moni, es que saben conseguir que la gente esté a gusto en su casa. Y eso es muy importante.

Por cierto, la niña, que cada día está más guapa, no dió el coñazo en ningún momento.

Ala, saludos y besos en el culo a todos y un besito a mi Churri que la he puesto de copia en el mail. Así que cuidado con las barbaridades que contestáis.

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